Cuando te enfrentas a una situación que en tu interior se cataloga como una amenaza, tu cuerpo activa su respuesta de “lucha, huida o parálisis”, liberando una serie de hormonas, principalmente cortisol y adrenalina. Estas hormonas preparan tu cuerpo para actuar rápidamente, tu corazón late más rápido, tu respiración se acelera y tus músculos se tensan, todo para ayudarte a enfrentar la amenaza inmediata.

El estrés agudo, como el que sientes antes de una presentación importante o durante una discusión, es temporal y generalmente se resuelve una vez que la situación ha pasado. Sin embargo, el estrés crónico, como el que proviene de problemas financieros, laborales o personales prolongados, puede tener efectos duraderos y perjudiciales en tu salud física y mental.

Imagen generada en Midjourney por Juan.

Efectos físicos del estrés

El estrés crónico puede tener múltiples efectos negativos en tu cuerpo:

– Sistema cardiovascular: bajo estrés, tu cuerpo libera hormonas que aumentan tu ritmo cardíaco y presión arterial. Si esta situación se mantiene a lo largo del tiempo, el constante esfuerzo sobre tu corazón y vasos sanguíneos puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, como hipertensión, ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

– Sistema inmunológico: el estrés prolongado debilita tu sistema inmunológico. Las hormonas del estrés, como el cortisol, pueden suprimir las funciones inmunitarias, dejándote más vulnerable a infecciones y enfermedades. Esto significa que puedes enfermarte con mayor frecuencia y recuperarte más lentamente de enfermedades comunes como el resfriado o la gripe por el “simple hecho” de estar estresado.

– Digestión: el sistema digestivo es especialmente sensible al estrés. Puedes experimentar problemas como gastritis, úlceras y síndrome del intestino irritable. Además, el estrés puede alterar tu apetito, llevándote a comer en exceso o, por el contrario, a perder el apetito, lo cual afecta directamente tu nutrición y salud general.

– Sueño: el estrés puede provocar insomnio o dificultades para conciliar el sueño. La falta de sueño reparador afecta tu energía, concentración y estado de ánimo durante el día, creando un círculo vicioso que agrava aún más los niveles de estrés.

Te dejo el enlace a nuestro artículo sobre el sueño y la salud.

Imagen generada en Midjourney por Juan.

Efectos mentales y emocionales del estrés

El impacto del estrés no se limita solo al cuerpo, también afecta a tu mente y tus emociones.

– Ansiedad y depresión: cuando tu mente está perpetuamente en estado de alerta, es más fácil que te sientas abrumado y desesperanzado. La falta de descanso mental contribuye a estos estados, haciendo que las preocupaciones cotidianas se vuelvan inmanejables.

– Problemas de concentración: una mente estresada lucha por concentrarse y recordar cosas. La sobrecarga de información y la preocupación constante pueden interferir con tu capacidad de enfocarte en tareas diarias, afectando tu rendimiento en el trabajo o en la escuela. Puedes notar que te distraes fácilmente y que es difícil completar tareas simples.

Te dejo el enlace a una charla TED en la que se habla sobre los efectos del estrés en la concentración.

– Irritabilidad: estar bajo constante presión puede hacer que te sientas más irritable y frustrado. Las pequeñas molestias pueden parecer grandes problemas, y puedes tener menos paciencia con las personas que te rodean. Esta irritabilidad puede dañar tus relaciones personales y laborales, creando un ambiente tenso a tu alrededor.

– Síndrome de burnout: el estrés laboral, en particular, puede llevar al agotamiento emocional y físico conocido como burnout. Este estado de cansancio extremo te hace sentir desvinculado de tu trabajo y reduce tu eficacia. El burnout no solo afecta tu rendimiento laboral, sino que también puede extenderse a otros aspectos de tu vida, afectando tu bienestar general.

Te dejo el enlace a nuestro artículo sobre el burnout.

Imagen generada en Midjourney por Juan.

Estrategias para manejar el estrés

Algunas de las cosas que se sabe que son muy eficaces para manejar el estrés son las siguientes:

– Hacer ejercicio regularmente es una de las maneras más efectivas de reducir el estrés. La actividad física ayuda a disminuir los niveles de hormonas del estrés como el cortisol y aumenta la producción de endorfinas, que son los químicos que mejoran tu estado de ánimo. No necesitas hacer un entrenamiento intenso, actividades como caminar, nadar o practicar yoga pueden ser muy beneficiosas.

– Practicar Focusing, meditación, yoga, o técnicas de respiración profunda puede ayudar a calmar tu mente y cuerpo, fomentan la relajación y pueden disminuir la presión arterial y la frecuencia cardíaca, contrarrestando los efectos físicos del estrés.

– Comer de una manera equilibrada y saludable fortalece tu cuerpo contra el estrés. Alimentos ricos en vitaminas y minerales, como frutas, verduras, y granos enteros, pueden mejorar tu bienestar general y ayudarte a sentirte más resistente ante situaciones estresantes.

– Asegúrate de tener un buen descanso, ya que el sueño es fundamental para manejar el estrés. Intenta mantener una rutina de sueño regular, evitando las pantallas y la cafeína antes de dormir.

– Hablar con amigos, familiares o con un profesional puede proporcionarte el apoyo emocional que necesitas. Compartir tus preocupaciones y sentimientos con personas de confianza puede aliviar la carga del estrés y ofrecer nuevas perspectivas sobre cómo manejar las situaciones difíciles.

Te dejo un enlace a nuestro artículo sobre las redes de apoyo social.

Reconocer los síntomas del estrés a tiempo es fundamental para poder tomar medidas antes de que se vuelva crónico. Prestar atención a señales como dolores frecuentes, cambios en el apetito, fatiga constante, alteraciones en el estado de ánimo, problemas de sueño, irritabilidad y dificultades para concentrarse te permite poner en marcha algún cambio que te devuelva tu calidad de vida antes de que el cuerpo termine enfermando.

Nos encantaría saber tú opinión sobre el estrés, si lo identificas en tu vida con facilidad o si tienes varios de los síntomas, pero no identificas lo que te estresa con claridad.

Javi: hoy en día el estrés es uno de los mayores problemas de la sociedad y como parte de ella, yo no soy menos. Desde hace ya tiempo siento que cómo el estrés me afecta en mi día a día. Para esto una de las mejores opciones es Focusing, te ayuda a conocer cómo te afecta y cómo mejorar tu relación con el estrés, porque de una forma u otra existe en nuestras vidas.

Juan: yo identifico con facilidad los estresores que me afectan con más frecuencia. Algunos son viejos conocidos y otros van y vienen con los cambios de la vida. De cualquier manera, hago bastantes cosas para minimizar sus efectos, y tengo una buena lista de cosas pendientes que mejorar al respecto, pero lo importante es saber que es una realidad que está en la vida de todos y que afecta directamente a nuestra salud.

Os leemos en los comentarios. Un abrazo enorme.

Juan.

1 comentario en “Como afecta el estrés a la salud”

  1. Pingback: La influencia de las relaciones sociales en el bienestar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *